Varios partidarios de Donald Trump que el pasado miércoles participaron en el asalto al Capitolio de EE.UU. en medio de violentas protestas y enfrentamientos con la Policía fueron despedidos por sus empleadores tras ser identificados en las redes sociales a través de imágenes que compartieron muchos de los propios manifestantes, informa AP.
Tal fue el caso de un empleado de Navistar Direct Marketing —una imprenta del estado de Maryland— quien fue fotografiado caminando por la sede del Congreso de EE.UU. con la tarjeta de identificación de su compañía colgando del cuello.
Sin revelar el nombre del trabajador, la empresa explicó su decisión indicando que no puede ofrecer empleo a personas que «demuestran una conducta que pone en peligro la salud y la seguridad de otros«.
Asimismo, Congensia, una compañía de análisis de datos basada en un suburbio de Chicago, rompió la relación laboral con su propio director ejecutivo, Bradley Rukstales, luego de que este fuera arrestado por ingreso no autorizado al Capitolio.
De manera similar, el departamento de bomberos de una localidad cerca de Orlando, Florida, inició una investigación contra uno de sus empleados mientras que el bombero Andy Williams, que se desempeñaba en la ciudad de Sanford, en el mismo estado, fue puesto bajo licencia administrativa remunerada mientras se esclarece su rol en los acontecimientos del miércoles. Asimismo, una terapeuta ocupacional de una escuela de Cleveland, Ohio, renunció tras su supuesta participación en los disturbios.
Incluso algunos dueños de negocios privados sufrieron consecuencias similares. Tal es el caso de Jenny Cudd, cuya florería Becky’s Flowers en Midland, Texas, recibió una catarata de calificaciones negativas en Internet, así como llamados a boicot, luego de que ella se jactara en las redes sociales de haber ingresado al Capitolio.
FUENTE:RT.COM