La tensión con las fuerzas federales provoca pequeños enfrentamientos mientras la Casa Blanca insiste en su estrategia
Los Ángeles – 26 JUL 2020 – 16:21 BOT
Las protestas antirracistas en la ciudad de Portland que el presidente Donald Trump pretendía “apagar” con el envío de fuerzas federales se intensificaron este fin de semana y además se extendieron a otras ciudades de Estados Unidos. En Seattle, violentos enfrentamientos con la policía dejaron 45 detenidos y 21 agentes heridos, según la policía. La noche dejó imágenes de despliegues tácticos por las calles, gas lacrimógeno y lanzamiento de objetos que contribuyeron a la sensación de aumento de tensión en un país básicamente paralizado por el coronavirus.
Estas manifestaciones nocturnas, concentradas en el centro de algunas ciudades, son los rescoldos de la ola de protestas antirracistas por la muerte del afroamericano George Floyd en Minneapolis que recorrió el país en el mes de junio en una de las demostraciones de fuerza ciudadanas más intensas desde los años sesenta. Pequeños grupos siguen aún saliendo a la calle cada en nombre de Black Lives Matter, el movimiento antirracista que inspiró las protestas. Para el público esadounidense, la situación había desaparecido de la televisión hace semanas.
Trump decidió enviar fuerzas federales a Portland, Oregón, donde esas protestas continuaban cada noche con cierta intensidad. Es muy raro que se desplieguen agentes de las pocas agencias policiales federales que hay (como los policías de las fronteras o los de los juzgados) para tareas de seguridad ciudadana en el centro de las ciudades. Los alcaldes y gobernadores no tienen ninguna jurisdicción sobre ellos. A mediados de julio, comenzaron a surgir videos en las redes sociales de agentes con atuendo militar, sin identificación, deteniendo a manifestantes por las calles de Portland en vehículos no identificados en el centro de Portland. Las imágenes encendieron las redes sociales, provocaron la indignación de toda la oposición demócrata, que denunció la táctica como secuestros extrajudiciales. Se presentaron al menos dos denuncias en los juzgados, ambas descartadas. Al ver la reacción, Trump anunció que enviaría más agentes a otras ciudades.
Las protestas en Seattle se intensificaron después de que el pasado jueves el gobernador demócrata del Estado de Washington, Jay Inslee, anunciara que se habían desplegado agentes federales en la ciudad y que le estaban dando información confusa por parte del Gobierno federal. Inslee pidió a los manifestantes que se comportaran de manera pacífica para no dar la razón al presidente Trump, que “busca confrontación”. Todas las grandes ciudades de EE UU señaladas por Trump tienen alcaldes demócratas, y la mayoría gobernadores demócratas, que han expresado su rechazo al despliegue.